Los signos de nuestra decadencia

No es que como país antes hayamos estado a la altura de las sociedades con los valores mas altruistas y puros. Pero es lamentable admitir que vamos en picada en lo que son los respetos por las reglas de convivencia, en lo que nos simboliza como ciudadanos en una determinada comunidad. Y no es que queremos endilgarle al gobierno todos nuestros males, pero una de las principales funciones de un estado es inculcarnos los valores morales como pueblo, y aquí la revolución bolivariana ha fallado en todo sentido.
A continuación vamos a describir situaciones y ejemplos que nos retratan fielmente y que grafican el fracaso nuestro como sociedad.

- Hace unos días un conductor de un camión arremete contra una manifestación que cortaba una avenida en Caracas, el saldo una persona muerta y otra herida. El alegato del chofer, pensaba que era una manifestación de la oposición y él es chavista.
- Al comienzo de su gestión el presidente Chávez mencionó que el robaría para comer. Sería bueno preguntarse si esas palabras no han tenido ninguna injerencia en el descontrol de la inseguridad que padece el país.
- Indigna ver a agentes del orden público irrespetar las luces en los semáforos, cuando se supone que son ellos quienes deberían inculcar el respeto a las leyes de tránsito.
- También es indignante ver en nuestras carreteras como desde vehículos lanzan papeles, latas y botellas sin el menor asomo de pudor, y lo que podría ser peor, que vayan niños en esos vehículos formándose con tan insensato ejemplo.
- Siguiendo en este ambiente de la basura, la mayoría de los camiones que ahora sirven para recoger los desechos en nuestras ciudades son los tipos volteos,  estos cuando están llenos van y hacen el traslado de estos desechos a los vertederos, pero antes van regando parte de su carga por las avenidas que atraviesan porque muchas veces no colocan protección que asegure tan indeseada carga, toda una incongruencia y a nadie se le ocurre que estos camiones deberían ir protegidos para no volver a verter la basura en la ciudad.
-  Pareciera que la corrupción es un modo de vida. Mientras se esté en el gobierno se tiene derecho a todo, y son inmunes a cualquier investigación. Conozco a muchos revolucionarios que no tendrían como justificar sus riquezas.
- Es un lugar común los asesinatos y secuestros en el país. Nos estamos acostumbrando a vivir encerrados y acorralados por la delincuencia.
- La mentira como justificación. Desde el nivel más alto hasta el funcionario de cualquier oficina pública miente descaradamente para justicarse ante los demás.

Y así llenaríamos todo un dossier con lo que nos está pasando como sociedad.
La pregunta es, ¿Qué hacer?