Políticos y... ¿trabajadores?

Con todo el revuelo que ha causado estos días la extradición a Estados Unidos de Alex Saab, y la implicación que representa para muchos políticos que pertenecieron por años a partidos de oposición que supuestamente estaban enfrentados al régimen que ostenta el poder en Venezuela, traigo el caso de un trabajador que pertenecía a la nómina de Puertos de Anzoátegui en el año 2004 cuando llegué al puerto de Guanta, su nombre: Richard Arteaga. Richard ha sido mencionado también con profusión estos días porque el pertenecióa a la comisión de contraloría de la Asamblea Nacional y que investigó los negociados de Alex Saab, y que en sus conclusiones no encontraron ningún atisbo de corrupción o delito que menoscabara los intereses de los venezolanos. Este extracto que publico a continuación está en mi libro "Así va la noche" publicado en Amazon y aquí les dejo el link: https://www.amazon.com/dp/B0985SPDLX/

"Recuerdo que entre aquellos nombres estaba el de un trabajador del departamento de operaciones de nombre Richard Arteaga. Richard llevaba un buen tiempo sin presentarse a trabajar y en su expediente de trabajo no había ni siquiera una nota de amonestación, igualmente él tampoco había presentado alguna justificación médica avalada por el Seguro Social, donde se justificara su imposibilidad de presentarse a trabajar. Richard era, además, militante del partido político Primero Justicia en Barcelona. Por esos días se celebró un encuentro auspiciado por la gobernación del estado con todos los alcaldes del estado Anzoátegui. Allí los directores de la gobernación y de las instituciones autónomas adscritas a ella fuimos también invitados buscando estrechar lazos con los representantes de los municipios. En esa reunión pude conocer y conversar un momento con el alcalde de Guanta, Luis Cardozo. Traigo a referencia este encuentro con los alcaldes porque casualmente unos días después, el gobernador me llama para referirme el caso de un trabajador de Puertos de Anzoátegui cuyo nombre era Richard Arteaga, pidiéndome que lo recibiera y conversara con él. ¿Cómo llega el caso de Richard Arteaga a manos del gobernador? Mi respuesta ─y me permito especular con esto─ es que ha debido ser a través de Gustavo Marcano, alcalde de Lechería y militante al igual que Arteaga de Primero Justicia. Es lógico suponer que, por medio de esa reunión, quedaron establecidos los canales de comunicación entre Tarek William y los alcaldes de la oposición en el estado, como era el caso de Marcano, y de aquí a pedir un pequeño favor para alguno de sus amigos y militantes no había mayor esfuerzo que marcar un número de teléfono. Por supuesto que me reuní con Richard Arteaga, y se llegó a un acuerdo con él para su desincorporación amigable y sin traumas de Puertos de Anzoátegui."